La fecundación in vitro intracitoplasmática ICSI es una excelente alternativa para pacientes que, luego de la evaluación por el especialista, se determina que tenían algún diagnóstico especial en la genética de los espermatozoides o que ya se habían practicado algún otro tratamiento de fertilidad sin resultados favorables.
Muchas de las parejas que han intentado quedar embarazadas, optan por esta opción, ya que como es una técnica de reproducción asistida, garantiza la unión del gameto (óvulo y espermatozoide) mediante el microinyector y aumenta las probabilidades de éxito frente a la tradicional FIV (Fecundación in vitro).
¿En qué casos se usa la Fecundación In Vitro ICSI?
Encontrar el tratamiento o técnica de fertilidad adecuada muchas veces es frustrante e incluso desalentador, es por esto que te invitamos a conocer algunas de las condiciones para la aplicación de esta técnica.
1-. Número reducido de espermatozoides (oligospermia)
Cuando existe un bajo recuento de espermatozoides, se reducen las posibilidades de fecundación del óvulo y, así mismo, de lograr un embarazo.
2-. Espermatozoides con alteraciones
Se considera que el esperma es de baja calidad cuando los espermatozoides tienen alteraciones, ya sea de movilidad o morfología, ya que se dificulta el proceso de llegada al óvulo y por tanto de fecundación.
3-. Fallos repetidos de fecundación o de FIV si ya has tenido múltiples fallos de fecundación o intentaste otros tratamientos similares sin resultados favorables, este puede ser el tratamiento adecuado para ti, ya que gracias a la técnica ICSI, el esperma se inyecta directamente en el centro del óvulo.
Estas son las principales indicaciones por las que la fecundación in vitro ICSI puede ser la solución para ti y para tu pareja. ¡Agenda tu cita!
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